viernes, 20 de enero de 2012

CAUDETE SOLIDARIO: Articulo CARITAS CAUDETE

            Todos conocemos a alguien que “lo está pasando mal”.

Tal y como anunciaba Cáritas Española a finales del año pasado, el desempleo y la pobreza se están multiplicando en este año 2011. La situación está cada vez más difícil y el número de hogares sin ningún ingreso sigue aumentando.
Hasta hace unos años, la población atendida en Cáritas Interparroquial de Caudete, presentaba un perfil más o menos similar. Por lo general, eran familias en su mayoría desestructuradas, con muchos hijos,  con escasos ingresos económicos, con consumo de sustancias adictivas, con alguno de sus miembros en prisión, etc.
Después, vino la llegada de los inmigrantes, estos  venían a Cáritas únicamente para informarse de cómo regularizar su situación, renovar su tarjeta, reagrupar a su mujer y/o sus hijos, etc. Casi todos ellos trabajaban y prácticamente ninguno vino a solicitar ayuda económica.
Cuando, en los medios de comunicación o en las misas de los domingos, nos pedían colaboración para Cáritas, a todos nos venía a la mente  la familia gitana, el mendigo que está en la puerta de la iglesia, el inmigrante que viene en patera, los países del tercer mundo y todos estos colectivos que, por desgracia  siempre  han pertenecido al mundo de la pobreza más severa.
Hoy todo ha cambiado mucho. Cuando oímos los datos de familias sin ingresos ya no pensamos en aquellos que siempre han tenido escasez sino que, cualquiera de nosotros puede formar parte de estos datos. Todos conocemos a alguien que “lo está pasando mal”, con todos los miembros de la familia desempleados, con unos ingresos no superiores a los 426€ de la ayuda del gobierno o incluso menores y lo que es peor, sin vistas a que la situación mejore a corto o medio plazo.
Antes, estas familias venían a Cáritas a traer ropa o incluso a dar algún donativo para los más necesitados y nunca se habían imaginado que algún día se podía dar la vuelta la situación y pasar de ser socios o donantes a ser demandantes de ayuda porque les resulta imposible cubrir las necesidades más básicas de la vida diaria, como es alimentación, luz, agua,…
Cáritas siempre ha estado ahí y ahora no deja de estarlo, el problema es que, del mismo modo que el número de demandas de ayuda ha aumentado considerablemente, el número de ingresos ha bajado de la misma forma. La crisis no afecta sólo a las familias y particulares, sino que nos toca a todos. Los ingresos de Cáritas y por tanto las ayudas que puede dar luego dependen de subvenciones tanto públicas como privadas, de la colecta recogida en las misas de un domingo al mes y de los socios y  donativos anónimos. Con la situación actual, el número de ingresos ha bajado bastante ya que, las subvenciones se han recortado mucho e incluso algunas de ellas han sido denegadas y tanto las colectas como los donativos también han disminuido. Por tanto, nos encontramos con una situación de impotencia a vernos ante situaciones a las que no podemos dar respuesta.
 Desde aquí, aunque sabemos que es complicado, pedimos su colaboración. Cualquiera puede hacer un ingreso anónimo en nuestros números de cuenta o pueden acercarse a nuestra sede en los salones parroquiales de Santa Catalina para rellenar la solicitud de socio y aportar la cantidad que quiera al año.
Cáritas agradece a todos su colaboración y en especial a aquellos socios que continúan aportándonos sus donativos.
NUMEROS DE CUENTA:

CAM                       2090  0007  41  0200045429

B. POPULAR          0075  0616  14  0600032120

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